Concepto abierto

Supongo que será por el exceso de programas de reformas angloparlantes a los que soy adicta: americanos, canadienses y australianos, la cocina de nuestra casa nueva me parecía pequeña y cerrada. No era lo que tenía en mente cuando decidimos mudarnos, padecía una sobredosis de concepto abierto. Así que en un acto de valentía decidimos tirar las paredes que delimitaban la cocina y crear un espacio abierto compuesto por la cocina, el comedor y el salón (también despacho temporal)

La planta baja de origen, estaba muy compartimentada, una cocina de 10 m2, pasillo  de 7 m2 y un salón comedor de 27 m2.  Demoliendo los dos tabiques que cierran la cocina y quitando las dos puertas, la planta se convierte en un espacio totalmente abierto, despejado y luminoso de 45 m2.

A continuación las fotos del antes, del durante y del después.

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FOTOS ANTES

FOTOS DURANTE Y DESPUÉS

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